El mundo está experimentando grandes transformaciones con la llegada de la web 3.0. Parte de esto es cómo interactuamos con los servicios digitales. El sector financiero no es la excepción. Por eso, en este artículo, exploraremos las características, ventajas y aplicaciones de la Web 3.0 en el mercado financiero, así como su impacto en la ciberseguridad, prevención del fraude y otros aspectos fundamentales para las entidades bancarias.
En primer lugar, es necesario mencionar que la web 3.0 es una evolución de la forma de navegar en Internet. Este avance busca:
A diferencia de las versiones anteriores, esta nueva web permite una experiencia personalizada. ¿Cómo? Con la integración de la inteligencia artificial, blockchain y redes peer-to-peer (P2P). Estas ofrecen un entorno más seguro y eficiente.
Es importante profundizar en las herramientas con las que cuenta la web 3.0, por ello, más adelante te las detallamos.
Esta nueva fase de Internet permite a las máquinas entender y procesar datos de manera similar a los seres humanos. Gracias a ello, se alcanza una navegación más intuitiva y adaptada a las necesidades individuales. Además, en lugar de depender de servidores centralizados, la web 3.0 opera sobre redes descentralizadas, lo que reduce las vulnerabilidades de seguridad.
La web 3.0 centra su objetivo en la inteligencia artificial y la innovación tecnológica. A continuación, algunas de las características principales que identifican y la diferencian:
La web 3.0 pretende crear un método para clasificar todas las páginas que se encuentran en internet. Para ser más claros: un sistema de filtrado o etiquetado que no solo permita a los buscadores encontrar la información en la red sino entenderla. Al cumplir con este objetivo, el usuario podrá acudir a la web para preguntar en su lengua. Sin necesidad de claves por un determinado asunto. De esta forma, la web aprenderá del resultado de las búsquedas para próximas operaciones.
En esta web, los internautas que visitan cualquier sitio tendrán que emplear menos tiempo en aprender a usarla. Su objetivo es que el diseño tenga estándares de una web más homogénea en sus funciones y más fácil de reconocer.
Las nuevas funciones que brinda la web 3.0 requieren de un internet mucho más rápido. En respuesta a esto, las principales operadoras de telecomunicaciones han implementado conexiones de banda ancha. Todo con el propósito de garantizar una experiencia de uso más satisfactoria para los usuarios. Las velocidades oscilarán entre 30Mbps y 1000 Mbps.
Diferente a sus versiones anteriores, en la web 3.0 la información se distribuye libremente por la web e impide que un solo dueño se apropie de ella. Con ello, la plusvalía de la propiedad sobre la información se pierde y garantiza un uso de la red más democrático.
En esta revolución de la nueva web se prevé una nueva explosión de datos abiertos generada por los propios usuarios. Estos usuarios sí se sienten seguros, protegidos y cómodos para compartir datos. Incluso, se sienten retribuidos por el uso de sus datos. Además, podrán participar en la generación de numerosos conjuntos abiertos de datos de gran utilidad para enriquecer aplicaciones o crear modelos predictivos de todo tipo (Marín, 2023).
Con esta nueva web, los programas y la información se convierten en pequeñas piezas distribuidas por la web. Todas capaces de trabajar conjuntamente. Esto permite que los internautas utilicen y mezclen estas piezas para realizar una amplia gama de tareas de manera más eficiente y personalizada.
La interoperabilidad entre plataformas y sistemas se potencia y facilita la creación de nuevas aplicaciones y servicios. Todo sin necesidad de depender de intermediarios. Así, la web se convierte en un ecosistema vasto y dinámico. Aquí es posible ejecutar múltiples tareas al mismo tiempo.
No es suficiente con conocer sus características o sus funcionalidades principales para entender completamente las ventajas y beneficios de esta web; es necesario compararla con sus predecesoras. Presta atención a cada una a continuación:
1. Web 1.0: Es la forma más básica que existe, con navegadores de texto y de solo lectura. Se caracteriza por la interacción limitada. En esta fase, los usuarios eran principalmente consumidores pasivos de contenido. Los sitios web eran estáticos y no permitían una participación activa.Estos cambios son cruciales para las entidades financieras. La personalización es clave para la fidelización del cliente y la competitividad. La confianza que genera el control de los datos personales potencia la relación con el usuario. Todo gracias al aumento de la satisfacción y la seguridad en las transacciones.
Su llegada trae numerosas ventajas para el mercado financiero, que pueden fortalecer tanto la seguridad como la eficiencia de las operaciones bancarias. A continuación, te contamos algunas de las más importantes.
Gracias a la descentralización, los usuarios tienen mayor control sobre sus datos y las transacciones se realizan de manera más rápida y segura. Los servidores descentralizados eliminan fallas frecuentes, lo que garantiza un acceso constante a los servicios financieros.
El uso de blockchain en la web 3.0 refuerza la seguridad de las transacciones bancarias, ya que protege la información personal de los usuarios y previene fraudes digitales. Las instituciones financieras pueden minimizar los riesgos asociados a la ingeniería social y pueden mejorar la seguridad de la información a través de sistemas descentralizados.
Esta tecnología del blockchain juega un papel crucial en la protección de los datos y transacciones en el sector bancario. El principio clave del blockchain es crear registros inmutables y descentralizados de transacciones. El valor de mercado de las tecnologías a nivel mundial en 2022 fue de aproximadamente 7.400 millones de dólares y se prevé que 2027 llegue a 94.000 millones de dólares (Statista, 2024). Estos bloques se enlazan formando una cadena. Como ves, es un sistema que garantiza que cualquier alteración en los datos sea prácticamente imposible, ya que requiere la aprobación de toda la red para validar un cambio.
La web 3.0 permite que cada usuario disfrute de una experiencia única basada en su historial de búsqueda y preferencias. Esto no solo mejora la satisfacción del cliente, sino que también permite a las entidades financieras ofrecer productos personalizados según las necesidades individuales. Adicional, optimiza su apetito de riesgo y ajusta las estrategias de prevención de fraude.
Las tecnologías innovadoras que conforman la web 3.0 tienen un impacto directo y tangible en la industria financiera. Te detallamos algunas de sus aplicaciones más relevantes.
A través de la tecnología blockchain, la web 3.0 facilita la utilización de criptomonedas como el bitcoin. Las instituciones financieras pueden ofrecer servicios relacionados con la compra y venta de estos activos al aprovechar la naturaleza descentralizada de la web y proporcionar a los usuarios mayor libertad para manejar sus finanzas.
El auge de los tokens no-fungibles (NFT) ha abierto una nueva oportunidad de inversión. Las instituciones financieras pueden integrarse en este mercado emergente, ofreciendo sus propios tokens y permitiendo a los usuarios participar en un mercado de activos únicos y no intercambiables. Estos activos representan propiedad o derechos sobre un bien. Pueden ser físicos o digitales, como obras de arte, coleccionables, inmuebles virtuales, entre otros. Lo que los distingue de otros activos digitales es su autenticidad verificada mediante blockchain. Esto garantiza su propiedad y exclusividad.
Para las instituciones financieras, esta tecnología ofrece una ventana única para explorar nuevas líneas de negocio e inversión. Al integrarse en el mercado de NFT, las instituciones pueden emitir sus propios tokens respaldados por activos tangibles o digitales. Así, tienen la posibilidad de ofrecer a sus clientes el adquirir o invertir en bienes únicos.
El open banking es un enfoque que permite a los bancos compartir la información de sus clientes con aplicaciones de terceros bajo el consentimiento del usuario. Es una de las principales ventajas que aporta la web 3.0. Gracias a ello hay una mayor integración y facilitación de la personalización de productos financieros. Además, aumenta la eficiencia en la gestión de pagos y otros servicios. La web 3.0 es la oportunidad de forjar un futuro en el que los datos sean de los usuarios y así, con una información descentralizada el open banking podrá cumplir con su rol de una manera más eficiente.
Uno de los puntos más destacados de la web 3.0 es su capacidad para mejorar la ciberseguridad en el sector financiero. Las redes descentralizadas, el uso de blockchain y de redes P2P ofrecen una defensa robusta contra ataques de ingeniería social y fraudes.
Una de las amenazas más comunes es el fraude bancario. En este, los criminales intentan explotar vulnerabilidades en los sistemas de seguridad para acceder a fondos o datos personales. Sin embargo, la arquitectura descentralizada de esta web ofrece una respuesta sólida a estos ataques, ya que distribuye los datos en múltiples nodos y dificulta su manipulación.
Otro pilar de esta web es el uso de redes peer-to-peer (P2P), que permiten la transferencia directa de información entre usuarios sin intermediarios. En el contexto financiero, las redes P2P abren la puerta a transacciones rápidas, seguras y económicas. Todo sin necesidad de recurrir a bancos o instituciones financieras tradicionales.
El potencial de las redes P2P en el mercado financiero es enorme. Pueden facilitar servicios como préstamos directos entre usuarios (peer-to-peer lending) y transferencias internacionales a bajo costo. Gracias a esta nueva web las transacciones se realizan con menor fricción, lo que beneficia a los consumidores y aumenta la eficiencia del sistema financiero global.
En síntesis, la web 3.0 está revolucionando el mercado financiero. Brinda a las entidades bancarias la oportunidad de ofrecer experiencias más seguras, personalizadas y eficientes a sus clientes. Las innovaciones como el blockchain y la descentralización no solo mejoran la seguridad de la información, sino que también permiten nuevas formas de interacción y transacción.
Adaptarse a esta nueva era tecnológica es clave para avanzar en un mundo digital en constante evolución. Te invitamos a seguir explorando estas soluciones avanzadas para potenciar tu entidad financiera. ¡Lidera el futuro de los servicios digitales!
Referencias Bibliográficas
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